Luego del apogeo de Modjo, Stardust o Planet Funk que venían de una directa inspiración de Cassius, Daft Punk, Chemical Brothers o Prodigy; este dúo de franceses la reventaron en grande con un álbum lleno de samples, referencias a la cultura pop y a la imaginería de la fiesta glam. Un discazo.
Desde que empieza nos damos cuenta que el EDM o Electronic Dance Music ha mutado una vez más y se puede apreciar en las distorsiones, los cambios de ritmo, la electricidad que lo sobreabunda y los reefs que están más apegados al sonido ácido de los 70 y a la combustión del post punk revival de los 2000.
Ya había pasado una década desde el mítico y extraordinario Homework de Daft Punk, pero acá la Francia llena de parranda se embriaga para hacerle cara de nuevo a la música disco. Con drogas. Fiesta. Beats.
«Por esos días estallaban sonidos nuevos con el glorioso In Rainbows de Radiohead, el estrambótico Sound of silver de LCD Soundsystem y los sonidos poderosos de Arcade Fire, The National o Feist... pero no importó para que el disco demostrará que la música nueva puede ser un gran remix acumulado de música vieja».
En cuanto a los sonidos, un gran locura: más de 500 samples desde Michael Jackson, Giorgo Moroder, George Clinton, Depeche Mode, Cassius, Happy Mondays, etcétera, etcétera, etcétera.
Líneas funky donde los bajos predominan y electrizan, ritmos en celebración al acid house, al fancy disco, al italo disco transgresor... En fin, múltiples capas lo llenan de consistencia y lo hacen único.
Fue pensado como una Opera Disco, y lo es, a pesar que confunde por su alusión a la Biblia y títulos cristianos. Pero se refuerza con un pop de club que se levanta, vende discos y no ofende a nadie. El título "†" es fabuloso y notable con la cantidad de imaginería pop que tiene en sus videos. No hace falta palabras, aunque las hay, lo que importa acá es el ritmo y la imagen. Estábamos entrando a una era mix media donde lo visual iba a cambiar totalmente la historia -y miren ahora los Reels, Tik Tok y Stories de redes sociales-.
'DVNO', 'D.A.N.C.E', 'Genesis' son tracks inolvidables y llenas de experimentación sonora, robótica, cool. En otras como 'Stress' o 'Water of Nazareth' hay estruendo y sensación claustrofóbica en los tímpanos. Sin embargo, todo el disco avanza delicioso y marca también el inicio de una nueva era: el Punk Dance.
Ya LCD Soundsystem lo estaba maquinando en su DFA Records con The Rapture o Hot Chip.
De esos discos para escuchar y bailar. Ver de lejos, también, porque ya pasaron buenos años y la calidad de sus sonidos instrumentalización -o samples- es como un ectasy que estalla en fiesta de medianoche en aquellos de juventud sin fin y fiesta descontrolada. En conclusión, un disco para apreciar. Una chulada.
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